17 de marzo de 2011

XII Poema cuántico: Romanticismo cuántico

Te escucho entre los versos del capitán.
Te pierdes entre las manos,
tu sombra se diluye
entre los fotones de oscuridad.

Te vuelves velocidad,
conversión misteriosa de tu materia.
Materia bendita,
repleta de núcleos ásperos
e inestabilidad reactiva.

Resguardo los últimos neutrinos
en mi caja de recuerdos,
llena de incertidumbre y de ti.

No me dejes volver,
retrocede el tiempo
con los agujeros de relatividad...
Vamos quédate en
este segundo eterno de luz.

Arqueotipo I: Calisto

En mis mares
no hay rastros de cielo,
las estrellas vagan
entre tantos naufragios.

Me escondo entre la escena
de la verdadera vida,
ilusionista
que huya entre lobos.

La olas me recogen,
vuelvo a lo inorgánico;
diluciones libres
de mi química inmortal.