Algoritmo Nº 1

Las vidas son dos rectas,
cuadriláteras
que nunca se encuentran
en las líneas del tren.

Aunque tú,
diosa femenina
desencantas la magia
en algoritmos elaborados
con mentiras tristes.

Faldas falsas,
computadores muertos
contagiados de gripe
no la aviar , entiende,
gripe del caos.

Lo siento,
mi programa aquí acaba,
formateando
FIN.

Sopa primitiva

Es la última canción
escrita en ruinas,
grietas agrietadas de dolor
buscan soldado que las llene de plomo.

Flores flotantes,
eminencias parietales
oscuros rincones
de Freud;
aunque el invierno
congele los versos míos.

Versos plagiados,
gritan sorry,
forgive me.

Bailan las ideas,
ahora sedimentan entre tantos tantos
la gravedad las deja volar
y decae este verso
con la fatídica palabra
fin.

Burlas

La melancolía se trasluce en papel
inventario de antología
se dispersan en huracanes
arremolinados de mi vaso
acuoso, acídico, fatídico.

Millones leen trozos de mí,
aunque en realidad
tragan palabras bajo cotiverzos
oscuros, llenos de sueños en polvo.

Letras en naturaleza muerta
composiciones vergonzosas,
la luna enluta el día.

Delirante, olvida esa locura,
que se queja de ser vieja;
chatarra literaria en poemas
amargas notas de sol,
fotografía en sepia.

Siglo hipócritas,
tardes sigilosas;
deudas impagas
versos alcoholizados.

El ron se vierte,
sobre el sol
vapores de lluvia,
alma que vuelas
despiadada, amanerada,
recorre el fin,
un papel trasluce los brazos
emociones en realidades acartonadas.

Sexto Poema cuántico - Urbanidad Nocturna

Giros infinitos de ansiedad,
tesoros escondidos tras caretas,
perdidos recuerdos en sepia
estrellas rotas.

Ansiedad, grietas nocturnas,
arpas retocadas
cenizas del futuro.

Qué urbano es recorrer
biografías inventadas,
vidas paralelas,
mentiras verdaderas.

Todos reconocen esa verdad,
boca fatídica que hablaste;
falsas ilusiones
eternos sueños maquillados.

Sólo sé,
nada se sabe
recorridos nocturnos por grietas
en tierras que gritan
desoladas a la soledad.

Ilusiones de mármol

Escribo con versos plagiados,
Neruda debe demandar
a la lengua española
por este poema.

Decadencia feliz,
sincera ocultada
entre poemas quemados,
lloran las teclas victimarias.

Juicios inútiles,
no way to forget in this place
I'm sorry,
bien amados y odiados míos.

Salgo en cesáreas,
vítreas, aletargadas
en romanticismos falsos,
atardecer loco y
lluvias reflexivas.

Hoy es el último verso,
que escribo
sin demandas de otros,
ni miradas, ni sueños,
sólo restos de papeles y
espejos quebrados de navidad.

Quinto poema cuántico - Memoriales de muros desérticos de sueños

Un piano resuena;
mentes recóndidas,
alter ego aparece en escena.
Sabes que escribo,
como maquina escrita por otros,
pequeño dios en la oscuridad.

Malvada diosa,
por qué me odias tanto?
no quise ser tu fin,
admitir estas pruebas,
el plagio que falla
en el pasado recontando
cuentos secos de magia.

Mira las estatuas de sal,
Macondo llueve lágrimas de mercurio,
suave y letal metal,
oro de agua.

Maldita diosa,
destructora de vida,
locura de vates y cura de enfermedades
es inútil negar este hecho
oscuro como tus ojos,
conciencia fotofóbica.

Sabes que este es el fin,
bendito fin,
inorgánico, fugaz
escrito con gritos de campo
aromas a trigales,
maldita diva...
huyes como el oro,
sueños de metal.

Tolerancia cero a tu voz,
apareces como puta de rojo
calla, ya sabes que este es...
mi amor,
maldita... te amo como siempre,
anti- amorío eres,
sueño de todo poeta,
fin exacto,
perfecta anatomía
inutil intentar olvidarte
al describirte.

Palabras renascentistas desde el pasado oscuro del inconciente de Lope.

Purulante núclido,
áureo clavel de incertidumbre,
caduco Helio eólico
argéntica esfera
zafiro tálamo
caído en manos
asesinas, trémulas.

Elipse circular infinita,
rayo rugiente;
transmutado trigo
de sol y mar.

Cínico esplandor,
errante Dios,
cristales en la bóveda
canoro calor blanco.

Todas íban a ser como Carla

A carla que descansa en la profundidad de

versos escondidos en el baúl de abuelas de cristal.

Carla, jaula corporal de sueños,

estrella oscura del cielo

materia gris de los días...

Electros te rinde honores

entre tantas urgencias y

enredos cuasi-eróticos de médicos,

transformaciones espantosas

tras el cristal azul cínico.

Respiras nitrógeno,

bendito gas que te mantiene

volátil, sutil, femenina...

mentiras tuyas, inventadas.

Patuda vestida de blanco,

con copas de vino cualquier cosa

pasa sobre ti,

Carla te alabo desde el lecho de

enfermedades mentales y electroshock.