Dedicado a los que nunca me han entendido.
Nadie te ignoracon tanta velocidad,
te pierdo en soluciones parciales
desviaciones diáfanas.
Alto cielo, azul que me rodea

Recta y fija flor de invierno
cae suave en la delicada superficie.
Mi día comienza,
entre tantas dudas
te alzas serena como tus fotones
místicos que iluminan
el partenón de la memoria,
vuelvo a ti.
Toda velocidad,
te vuelves energía y cuanto
me pierdo en ti
no sé dónde termina
la infinidad musical.
No hay comentarios:
Publicar un comentario